Les gusta el dinero casi tanto como a los cerdos de las huchas.
Aunque se comunican de forma extraña, pueden ser simios muy amorosos y pasionales.
Visto y no visto: estos monos son los más rápidos de la jungla.
Los únicos primates capaces de poner huevos.
Grandes aficionados a quemar su tarjeta sin moverse del árbol.
Su habitat natural es el espacio exterior, los sueños y las ciudades lluviosas.
Metódicos y obsesivos: no paran hasta que el lápiz se queda sin punta.
Generosos por naturaleza, no dejan que nigún sujeto de su grupo pase hambre.
Su apetito no tiene límite. Conviene tener una fregona cerca de ellos.
Están por encima de las apariencias: estos monos buscan la belleza interior
Coleccionistas aficionados. Siempre se quedan con algún suvenir.
Están locos por los focos, los flashes y las actrices simio-adolescentes.
Coleccionistas experimentados. Les cuesta desprenderse de sus cosas.
Odian moverse por la junga a pie.
Coleccionistas compulsivos. Lo guardan todo. Absolutamente TODO.
Se organizan en torno a machos alfa carismáticos y un pelín genocidas.
Se transforman, aullan y cambian de pelaje con mucha facilidad.
Estos monos anteponen la felicidad de sus crías a cualquier otra cosa.
Forman parte del primer grado del Club: "Amigo de los monos".
Aman el deporte y la limpieza. Y, sobre todo, odian los espacios cerrados.
Los más creativos y talentosos, aunque con cierta tendencia a la escatología.
Monos amantes de la selección natural y de la lucha entre las especies.
Simios de moral intachable. ABSOLUTAMENTE intachable.
Buenos, solidarios, empáticos... Estos primates son moralmente aceptables.
Nunca te fíes de ellos: son los más inmorales de entre los monos.
Primates obedientes y serviciales.
Primates muy obedientes y muy serviciales.
Los monos más obedientes y serviciales: SIEMPRE al servicio de su cuidador.
Forman parte del segundo grado del Club: "Zoólogo amateur"
Forman parte del tercer grado del Club: "Maestro en primatología"
Han llegado al último grado del Club: "La jaula del Gran Primate"
Se vuelven locos con las emociones más extremas de la caja tonta.
Mitad simio y mitad topo: estos primates no son capaces de mantener la boca cerrrada.
Los primates más fieles, leales y discretos.